El piloto también servirá como embajador de la escudería en el mercado asiático, buscando conseguir mejores patrocinadores.

Zhou Guanyu, el primer piloto chino en la historia de la Fórmula 1, está listo para un nuevo capítulo en su carrera al unirse a Ferrari como piloto reserva para la temporada 2025. Este movimiento marca un importante regreso al deporte para Zhou, quien finalizó recientemente una etapa de tres años con Sauber (anteriormente Alfa Romeo).

Zhou vuelve a la máxima categoría del automovilismo

Después de un debut prometedor en 2022, donde logró su primer punto en el Gran Premio de Bahréin, Zhou se presentó ante su afición en China el año pasado, coincidiendo con el regreso de la F1 al país tras un paréntesis de cinco años. A pesar de enfrentar desafíos durante su última temporada, donde solo pudo sumar puntos en un octavo puesto en Qatar, su experiencia lo convierte en una opción valiosa para la Scuderia.

Con la metamorfosis de Sauber hacia Audi programada para 2026, Zhou y su excompañero Valtteri Bottas fueron dejados fuera de la parrilla al final de la temporada pasada. Sin embargo, esta salida le abre la puerta a nuevas oportunidades, ya que varios equipos de primer nivel estaban interesados en contar con él como piloto reserva. En este ambiente competitivo, contar con un piloto de confianza se vuelve crucial, especialmente dado el apretado calendario de la F1 en los últimos años.

Regreso a sus orígenes 

Zhou se unió a la Ferrari Driver Academy en 2014, donde mostró un gran potencial desde sus inicios en karts. Su destacada actuación lo llevó a terminar segundo en el campeonato italiano de F4 en 2015. A pesar de haber dejado la Ferrari Driver Academy para unirse a Renault en su camino hacia la F1, su vinculación con Ferrari ha continuado siendo un factor clave en su desarrollo como piloto.

Giovinazzi, su compañero de garaje

En esta nueva etapa, Zhou compartirá las funciones de piloto reserva con Antonio Giovinazzi, quien tradicionalmente ha representado a la Scuderia en varias competiciones. La importancia de tener un sólido «banco de suplentes» se hizo evidente cuando Oliver Bearman, un piloto joven, logró puntuar al sustituir a Carlos Sainz en el Gran Premio de Arabia Saudita el año pasado.

Además, el futuro de la F1 se vislumbra emocionante, ya que GM/Cadillac debutará en la competición con unidades de potencia de Ferrari a partir de 2026. Pilotar un Ferrari no solo es un honor, sino que también podría ser un trampolín para Zhou, aumentando sus posibilidades de regresar a la parrilla de F1 en futuras temporadas.

Fuente: Meridiano